Si viajamos hasta San Javier y luego 29 kilómetros al oeste, llegaremos a La Brava, el corazón de un área de importancia para la conservación de las aves (AICA o IBA en inglés) según BirdLife International (Aves Argentinas-AOP).
Una que otra arrocera, algarrobales y pastizales extensos dominan el paisaje que rodea a los Arroyos Saladillos Dulce y Amargo. El espartillo y el ñandubay se recortan sobre islas y playas salinas, y brindan en conjunto el hábitat para unas 250 especies de aves, entre residentes y migratorias.
En otoño los sobrepuestos llegan desde la Patagonia; en invierno los flamencos y coscorobas bajan desde las lagunas andinas y en primavera los bellos capuchinos arriban desde el Neotrópico. Pero a comienzos del verano, llegan los únicos pajaritos (Paseriformes) que increíblemente vienen desde América del Norte: los charlatanes. Y por abril, estos verdaderos titanes de la migración, concentran por cientos de miles para emprender su regreso. En fin, turistas, fotógrafos, científicos y naturalistas de la región ya vienen por causa de las aves silvestres.
Y hay más encanto en el pago mocoví, Gustavo Marino nos cuenta acerca de otro aspecto remarcable para la zona: “Desde el 2010, con ganaderos y técnicos locales, desarrollamos experiencias de manejo de pastizales y conservación de la biodiversidad en el marco de la Alianza del Pastizal. En San Javier y su zona de influencia acuñamos un sello de calidad para la producción ganadera”. Hoy, la “Carne del Pastizal” es comercializada exitosamente en el mercado porteño y representa un ejemplo que motiva el desarrollo de productos amigos de la biodiversidad en otros biomas.
Otros productos sanos e inocuos para biodiversidad aguardan ser desarrollados en el “Paraíso Costero”. La harina de algarroba o el “arroz amigo de las aves” están muy cerca de ganar su lugar como productos noveles en el suelo santafesino. Esperemos que pronto suceda, al fin de cuentas, la producción y el consumo sustentables basados en la conservación de la vida silvestre ya resultan impostergables!
FUENTE: Gustavo Marino / Marcial Bugnon